Jesse Buglione

Y se tenía que dar, tenía que pasar en algún momento, como hace más de 10 años. y por suerte esa espera termino, finalmente volvió al país tal vez el último estandarte del punk melódico, Lagwagon volvió! (y no en forma de fichas por suerte!) para darnos un certero golpe al corazón y a la capocha llena de lindos recuerdos.

Porque la historia se repite, y a veces, unas pocas veces, eso es una suerte. Joey y su gente volvió al país y volvió con gloria, y con mucha nostalgia! Casi para traernos un Deja Vu, la sensación era la misma de aquella vez, una terrible ansiedad, ganas de cantar, de gritar y pogear a lo loco, de ver al loco Joey y tomarse una cerveza. Y para ponerle un toque más de nostalgia, nuevamente Shaila fue la banda que abrió para Lagwagon, como en aquel «Cemento» del año dos mil, donde los vimos por primera vez.

Lagwagon en Argentina — Lagwagon en vivo en Argentina

La banda de California arrancó algo demorada. Alrededor de las 22:00 hs del viernes salieron a escena, Shaila minutos antes había dejado a la gente con entusiasmo. Cerca del inicio, minutos antes, globos, pelotas inflables y demás cosas volaban (incluyendo personas?) hasta el escenario. Cuando poco a poco las ansias cobraban fuerzas, y los plomos corrían riesgo de recibir un pelotazo el show estallo con Island of shame, Violins y Kids Don’t Like to Share al hilo! Cosa que dejo de lado los globos y pelotas voladoras, para dejar paso solo a punks voladores! La fiesta había arrancado!

Sin un solo momento aburrido, con siempre clima festivo, pogero y con una banda también feliz sobre el escenario, los cantos hacia la banda nunca pararon, los temas eran tan pogeados como coreados, y el show se dio con una frenética normalidad, hasta llegar al momento mas alto de la noche con «May 16» del discazo «Lets talk about feelings» del año 98.

El único momento desprolijo fue algo positivo a fin de cuentas, en el primer tema de los bises, una amiga de Joey subió junto a la banda con un Ukelele (?) en mano (No llegamos a saber a ciencia cierta como consiguió estar en el escenario, si era algo pautado con tiempo o pinto en el momento) para cantar «Black Eyes» que comenzó con algún problema de sonido pero rápidamente se transformo en un tema igual de coreado.

A fin de cuentas, el show paso tan memorable como corto, no es que la lista de temas estuviera mal, es que todo paso demasiado rápido, o quizás no, quizás fue la dosis justa para quedarnos con las mismas ganas de verlos nuevamente, al igual que 13 años atrás, solo esperamos que no se tomen tanto tiempo…

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